
Tal vez ya te has decidido o estás barajando seriamente la opción de adoptar un gato. Un nuevo miembro de tu familia. Si es la primera vez que tienes un pequeño felino en casa, sin duda, tienes que tener en cuenta una serie de consejos que te ayudarán a hacer más fácil esa adaptación que requiere la convivencia con tu nueva mascota. Por eso, hemos recopilado, con ayuda de una experta, una serie de consejos útiles para disfrutar al máximo de esta nueva y enriquecedora experiencia con tu gatito.
No es como un perro
Es uno de los problemas más habituales para los novatos con un gatito en casa: pensar que su comportamiento va a ser similar al de un perro. "Puede querernos y buscar mimos como un perro, pero siempre hay que dejar el gato a su aire, que sea él el que busque el contacto que quiera con nosotros y no atosigarle. No conviene estresar al gato con más contacto con nosotros del que él quiera tener. Aunque son animales súper agradecidos y que les encanta el calor del cuerpo de su cuidador y disfrutará de una buena siesta en el sofá", nos cuenta.

Lo primero que tienes que tener en cuenta
¿Qué es lo primero que debemos tener en cuenta cuando llega el gatito a casa? Tal y como nos explica la experta, hay muchas cosas que debemos plantearnos, aunque destaca dos de ellas: por una parte está el estado sanitario del animal y de los animales con los que va a convivir, si es que los hay. Por otra parte, está su bienestar psicológico, para lo cual necesita tener los recursos adecuados (agua, comida, arenero, juegos). "En ambos casos, consulta con tu veterinario y él te aconsejará".
Los gatos y el aseo
También hay que tener en cuenta que los gatos son animales muy celosos de su limpieza. "Se recomienda tener un arenero más que el número de gatos que haya en casa, separados entre sí, preferiblemente que sean descubiertos, y siempre que sea posible con arena aglomerante y sin perfume (siempre que el gatito no ingiera jugando las arenas, en cuyo caso hay que optar por un tipo de arena diferente). Se recomienda recoger heces y orines a diario". El gato adora la limpieza y pasa gran parte del día acicalándose. "En condiciones normales no tendrás que bañar nunca a tu gato. Pero si tú gato tiene el pelo largo, sí se beneficiará de que le cepilles el pelo"
Cuida su alimentación
Uno de los aspectos que tal vez te pilla fuera de juego si nunca has tenido un gatito es el de su alimentación. Lo primero que tienes que tener en cuenta es que hay que darle una alimentación adecuada a su etapa de vida (gatito, adulto, adulto esterilizado, senior) y bien equilibrada. "Se recomienda que coman tanto alimento seco como

húmedo, y aprovechar cuando son pequeños para que prueben todos los sabores y texturas, no debemos darle siempre el mismo tipo de alimentos. Es aconsejable que coman el 90% de su ración por lo menos de alimento completo y un máximo de un 10% al día de alimento complementario (todos los alimentos comerciales vienen marcados con esta nomenclatura)".
Todos los accesorios que necesitas
Caja de arena, cepillo, juguetes… ¿Qué necesitaremos en casa para nuestra nueva mascota? "Todos los gatos deberían tener 1-2 areneros, un comedero para la dieta seca y otro para la húmeda, un bebedero independiente del comedero y suficientemente ancho como para que no le rocen los bigotes al beber, puesto que no les agrada, un rascador con estabilidad para que el gato pueda trepar y afilarse las uñas, un sitio para descansar, cepillo para el pelo dependiendo de la raza de gato y juguetes, entretenimiento que no falte"

¿Y si hay otros animales en casa?
Hay personas que 'se estrenan' con un gato en casa, pero que ya tenían otros animales, perros en muchas ocasiones, ¿Cómo debemos afrontarlo? "Yo aconsejo consultar con un veterinario u otro profesional antes de adoptar una mascota, ya que según el estado de salud de las mascotas que ya tenemos y de sus características y carácter, nos podrán orientar hacia qué mascota debemos adoptar para no tener problemas en un futuro", nos dice.
¿Es cierto entonces lo de llevarse como el perro y el gato? Lo cierto es que es un mito, pues ambas especies pueden vivir en armonía y más si lo han hecho desde cachorros. En el caso de que no sea así, hay que tener un poco más de paciencia y confiar en que la conducta social es extremadamente adaptable, aunque, probablemente, sí requerirá un proceso de adaptación más lento. Como pasa con los niños, hay que respetar ese periodo. Nuestra labor es respetar las necesidades de cada especie y de cada mascota por separado.
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